Te admiro. El simple hecho de que estés ahora mismo leyendo esto después de todas las batallas con las que has lidiado. Esos días donde solo vemos oscuridad en nuestra vida, esos pensamientos con los que debemos lidiar, esas palabras que no sabemos expresar.
Todos en algún momento nos sentimos solos, sin esperanza, como si vivieras estando muerto. Pero, quiero decirte que no todo es blanco y negro. Puedes aprender a ver el mismo panorama colorido que deseo que el mundo vea.
En medio del campo de batalla, hay sueños, metas, objetivos, personas o creencias que nos ayudan a vivir. Una vida sin propósito nos lleva al desánimo. Voy a darte 3 consejos para salir de la oscuridad.
1. Siempre haz algo que ames. Como sabrás, todos tenemos un talento. Quizá cocinar, tejer, escribir, dibujar, cantar, bailar, ser bueno en algún deporte, etc. Si no sabes cuál es el tuyo, tu misión es descubrirlo. Haz cosas nuevas. Ábrete paso a un mundo lleno de nuevas oportunidades sin temer al fracaso. Es tiempo de dejar de ver todo desde una perspectiva de desánimo y temor. Una vez que lo descubras, pule tu talento. Recuerda que no se trata de ser el mejor en lo que hagas, sino la mejor versión de ti.
2. Rodéate de la gente correcta. Debes saber que la atmosfera a tu alrededor influye mucho en ti. Por ello, busca rodearte de personas que sean de bien para ti. Gente que trata de superarse y aspirar a ser mejor, que no necesitan pisotear a los demás para destacar, que hacen el bien sin pedir nada a cambio,… Esos pequeños detalles que hacen la diferencia si importan.
3. Date un tiempo para ti. Es importante que, en algún momento de tu día, reflexiones sobre tus decisiones, medites sobre tus pensamientos, que tengas ese tiempo para conocerte a ti mismo. Aléjate de la tecnología un rato, lee un libro, escribe sobre tu día, llama a alguien con quien no habías hablado en mucho tiempo, haz esas cosas que te propusiste y nunca empezaste o terminaste.
En este mundo aún hay muchas cosas buenas, hoy quizá despertaste teniendo un hogar, un trabajo, salud, estás con vida. Hay mucho por lo que estar agradecido. Ten esperanza. Vendrán las tormentas, pero por mientras, baila bajo la lluvia.