El sonido del timbre me saca de mis pensamientos, Francisco vino a devolver las llaves de nuestra casa, está dispuesto a terminar la relación porque piensa que yo no lo amo lo suficiente.
Al otro lado de la puerta Francisco está perfectamente vestido con una camiseta blanca y un pantalón negro, llevaba una sonrisa maliciosa que siempre me hace perder la razón y besar sus labios.
Se acerca, pone sus manos en mis mejillas, intenta besarme, le doy un leve empujón, doy unos pasos hacia atrás, su aliento apesta alcohol, se dirige de nuevo hacia mí, acortando el aire entre nosotros, mi espalda toca la pared estoy acorralada no puedo escapar, esta vez pone sus manos en mi cintura, me besa, su beso es rudo, trato de escapar por el costado, pero sujeta mi rostro con sus manos, logró apartarme.
Sus ojos están rojos, aprieta sus puños y golpea el espejo que se quiebra de inmediato, uno de los vidrios hace un leve corte en mi pierna. Francisco está perdido en la sangre que es poca pero hace un pequeño recorrido entre mis dedos.
Pienso que esto lo detendrá, me giro sobre mis pies para alejarme, pero sujeta mi brazo y me vuele hacia él.
Jenn Rojas.
Lo siento por esa mala experiencia que pasaste! Espero que estas mejor! Saludos!
Muchas Gracias.
Aprendí mucho de esta experiencia. Ahora estoy mejor gracias. ¡Saludos!
La narración muy bien. El gancho narrativo no es cortar la escena, está debe cerrar, y dejar una nueva interrogante o conflicto o pendiente. No olvides los tiempos verbales, o presente o pasado.