Jueves. Siete de la mañana. El despertador del celular suena. Despiertas. Fijas la alarma para el día siguiente. Afuera está oscuro. Escuchas el ruido de los camiones de transporte pasando en la calle principal. Bajas a la cocina por tu desayuno. Sacas una caja de waffles del congelador. Aumentaron su precio durante los últimos meses debido a las nuevas políticas económicas del presidente López Obrador, pero te encantan, valen la inversión.
Pides un Uber para ir a la universidad. Te subes al auto y durante diez kilómetros no intercambias ni una sola palabra con el conductor. Al llegar realiza el cobro a tu tarjeta y lo calificas en la aplicación: “Cinco estrellas, muy amable”.
Ves a tus amigos, todos se encuentran emocionados. Hoy es el estreno de la nueva película de los Vengadores. Meses atrás habían comprado más de treinta boletos para la preventa y por fin había llegado el día. Ni se imaginan que se convertiría en la película más taquillera de la historia.
Llegas a tu casa en la madrugada. No puedes quitar la sonrisa de tu rostro. “No puedo esperar a ver lo que harán el próximo año”, piensas inocente.
Si existe la probabilidad de que algo suceda, por semántica, también existe la probabilidad de que no lo haga. Y tú sigues con tu vida por esa probabilidad. Estudias siguiendo al sistema por esa probabilidad.
Tal vez no la ves hoy, tal vez no existe en tu circunstancia actual, pero para eso viven los soñadores como tú, los inventores, los artistas, los que cambian al mundo, los que escriben.
Omar Araujo
Relee en el libro el capítulo de marco temporal.