Los fantasmas que hay en mí

Dicen que el pasado viene y va pero esto depende de la persona misma. Si decide que los recuerdos del ayer se queden para jamás irse o dejarlos volar y perderse en el viento.

Hace un tiempo una amiga muy cercana me contó una breve historia que su abuelita le compartió. Aún la recuerdo con gran empatía.

– ¿Tú sabes porqué los dientes de león son los más hermosos? – A lo que descorsentada respondí- No, ¿Porqué?

– Dulcementeque miró el cielo azul y contestó- Porque dejan el pasado atrás, no retroceden nunca. ¿Haz soplado alguna vez uno? – me preguntó con una tierna sonrisa.

– No, nunca.

– Muy bien, te explicaré. Un diente de león al recibir un cálido soplo, se eleva, ¿Verdad? – asentí con un movimiento de cabeza – entonces vuela pero no para caer en el mismo sitio, sino, para seguir otro rumbo donde al finalizar aquella aventura que emprendió en aquel momento, éste inicia una nueva historia pero sin regresar al lugar del que fue desprendido, jamás vuelve. Es por eso que es hermoso, por ser valiente y fuerte.

– Cada palabra escuchada hizo que una lágrima brotara, no tengo palabras para describir todo lo bello que sentí – Gracias Liza, es una linda historia.

Me he dado cuenta de que tengo que ser tan valiente, tan fuerte e una intrépida aventurera igual que aquel diente de león. Tengo que ser una cazadora de sueños, y dejar ir a los fantasmas que hay en mí.